Nació en Bombal, provincia de Santa Fe, el 5 de abril de 1939. A los seis años comenzó a tocar la guitarra, aprendiendo música en su ámbito familiar, y posteriormente con profesores. Estudió Filosofía y Letras y se graduó en la Universidad del Litoral.
Obras realizadas:
Dos libros de poesía: "Pampamérica" premiado por la Fundación Steimberg, y "Al sur del canto" utilizado como texto en escuelas primarias de Córdoba y Santa Fe.
Composiciones musicales en colaboración con: Oscar Além, Máximo Aguirre, Jorge Viñas, Julio Secundino Cabezas, Pedro Risso.
La cantata "Ay, Patria mía" sobre la vida del Gral. Belgrano y textos del historiador Máximo Aguirre fue musicalizada y protagonizada por la cantora en el Teatro Municipal de Morón, con el concurso del Coro Polifónico Fernández Ceballos y el actor Oscar Casco.
Escribió y condujo durante seis años el programa "Pampeanías" por L.R.A.1 Radio Nacional de Buenos aires y la cadena celeste y blanca.
En 1995 el periodista y musicólogo René Vargas Vera escribió la biografía titulada "Suma Paz por la huella luminosa de Yupanqui" que incluyó un trabajo de investigación sobre origen y evolución del cancionero bonaerense realizado por la artista, además de algunos poemas.
Ediciones Corregidor editó el libro de poesías “Última guitarra”, que fue presentado en la Feria del Libro 2001.
Actividad artística y cultural:
Radio, televisión, festivales y recitales unipersonales.
En Japón cumplió una importante gira de 40 recitales, grabó discos y se presentó con carácter estelar por la N.H.K.
En París la Embajada Argentina y la Unesco auspiciaron la presentación de sus recitales "Homenaje a Atahualpa Yupanqui" y presentaron el libro "Suma Paz por la huella luminosa de Yupanqui" con la presencia de su autor.
El mismo año -1995- realizó una gira por Alemania que culminó en Berlín con el mencionado recital.
En el 2002 Participó del "Año Yupanquiano" con distintas presentaciones en el país concluyendo con una brillante actuación en el Teatro Colón.
Charlas, cursillos y talleres:
Integran un aspecto caracterizado de su labor desarrollada en escuelas y claustros universitarios.
Dentro de los mismos ha cumplido recitales didácticos en departamentos de musicología en universidades de California, E.E.U.U.
Por Radio Nacional y sus 40 filiales, escribió y condujo durante seis años el programa «Pampeanías». En la última edición del Festival de Cosquín recibió el Premio Especial a la trayectoria.
Entre sus trabajos más destacados están «La incomparable Suma Paz» (1960); «Guitarra, dímelo tú» (1961); «Suma Paz La incomparable» (1963); «Lo mejor de Suma Paz» (1970); «Las hondas raíces de Suma Paz (1980); «Llenar de coplas el campo” (1972); «Una mujer con alma de guitarra» (1970); «Para el que mira sin ver» (1982); «Homenaje a Atahualpa Yupanqui» (1994); «Canto de nadie» (2000) y «Parte de mi alma» (2005). Publicó tres libros de poesía «Pampamérica» (premiada por la Fundación Steimberg); «Al sur del canto» y «Ultima guitarra».
Entre otras distinciones, recibió el Premio a «Los Grandes Intérpretes» (SADAIC); el Martín Fierro del Instituto de la Tradición de Rosario; el Premio «Alicia Moreau de Justo»; el «Discepolín» del Departamento de Cultura del Partido Justicialista y el Kónex de Plata como una de las «Cinco mejores intérpretes de folklore».
"Yo creo que uno nace y se desarrolla en un lugar, y que hay un profundo vínculo entre el hombre y su paisaje, su entorno. Vamos a poner un ejemplo: en los lugares montañosos el sol sale tarde en la mañana y se va temprano; nunca se puede ver una puesta de sol o un amanecer. La piedra, aunque sea amada y cantada por el hombre del lugar, lo encierra, entonces el canto que surge es el grito; el hombre pega el grito como una forma de liberación, hacia arriba, hacia el cielo. En cambio, el hombre nacido en la pampa tiene todo el cielo y todas las estrellas que parece que se le vienen encima. Tiene las primeras luces del sol a la mañana y las últimas del anochecer. El horizonte es la primera abstracción para el hombre, ya que es una línea que se ve pero que no existe, porque en la medida que avanza, se aleja más. Nunca va a encontrar el horizonte, sin embargo está ahí. Entonces el canto de ese hombre es reflexivo, intimista, profundo, como asombrado por la grandeza de la inmensidad."
Acerca de las enseñanzas que le dejara Don Atahualpa Yupanqui:
"Para mí, Yupanqui fue un maestro en el sentido profundo de la palabra y lo primero que me dijo fue: “Si usted quiere lucirse, quiere ponerse lindos vestidos y salir en las tapas de las revistas, cante otra cosa”. ¡Así era él! Y también me dijo otras cosas muy puntuales que me sirvieron mucho, como por ejemplo: “Póngase detrás de su canto, nunca adelante. No se luzca usted, haga que se luzca lo que usted hace, que es más importante que usted”. Y otra: “Los atajos son lindos, son cortitos y la van a llevar rápido… lástima que la van a llevar por otro lado”. Y algo que también me dijo al principio: “Usted ha elegido un camino áspero y solitario; asúmalo y no se queje”.
Acerca de qué es la pampa para ella:
"Es una deidad, un símbolo. Hay una especie de simbolismo que va más allá de la cuestión geográfica o cardinal de nuestro paisaje. Yo la descubrí a muy temprana edad, en la casa de mi abuela, a los 7 años. Yo me estaba hamacando y en el vaivén de la hamaca, de pronto sentí que la tierra se levantaba con todo su esplendor y su belleza, con sus verdes de distinta tonalidad, con sus lejanías, con sus montecitos de árboles en la distancia y con sus cuadros sembrados, ya que esa zona donde mi abuela tenía su charca era pampa agraria,
donde se sembraba mucho maíz, trigo…y ahora soja. Eso es la pampa. Y más allá de todo eso, de la visión que uno lleva en los ojos, está lo demás: ese ayer histórico de los malones, de la soledad, del peligro, de la salvaje libertad."
La historia de los versos a su guitarra y luego, el bellísimo poema de Suma:
"Estabamos actuando en Río Negro con Los Chalchaleros, ellos estaban jugando al truco mientras esperaban la actuacion y Ernesto Cabeza siempre me decia "-... veni sentate al lado mio que me traes suerte...-", una vuelta ,en esas reuniones, me pregunta Juan Carlos Saravia "-Que es la guitarra para vos?... porque para nosotros con el asunto de las curvas nos parece una mujer-", entonces yo le respondi "-como un hijo-". Asi nacio el poema con el titulo de un mate que me regalo Fernando Ochoa, que dice"una mujer con alma de guitarra".
"Yacente mujercita de madera
sola en tu caja negra y olvidada,
tu muerte de árbol no valió de nada,
porque eres inmortal de otra manera.
Al alzarte en mis manos con ternura
y entibiar con tus voces mi regazo
eras un poco el hijo entre los brazos
y yo tambien un poco tu criatura
porque junté mi canto con el tuyo,
en la niñez desde el primer arrullo
y juntas vida y suerte nos amarran,
ahora ya se quien soy
desde tu entraña,
me lo ha dicho tu voz
que nunca engaña,
una mujer con alma de guitarra."
Suma Paz
Suma Paz
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